El Cielo en la Tierra

Divina Voluntad

HÁGASE TU VOLUNTAD

25 de Julio de 1917  Vol. 12  

«El acto más noble, más sublime, más grande, más heróico es hacer mi Voluntad y obrar en mi Querer, por eso, a ese acto, al que ningún otro acto puede igualar, le hago gala de todo mi amor y generosidad y en cuanto el alma se decide a hacerlo, Yo, para darle el honor de tenerla en mi Querer, en el acto en el que los dos quereres se encuentran para fundirse uno en el otro y hacerse uno solo, si está manchada la purifico; si las espinas de la naturaleza humana la circundan, se las destrozo; si algún clavo la traspasa, esto es: el pecado, Yo lo pulverizo, porque nada puede entrar de mal en mi Voluntad; es más, todos mis atributos la penetran y le cambian la debilidad en fortaleza; la ignorancia en sabiduría, la miseria en riqueza y así de todo lo demás.  En los otros actos que no son hechos en mi Querer, siempre queda alguna cosa de sí; pero en aquellos queda el alma despojada de toda sí misma y Yo la lleno toda de Mí.»